Publicado en eldiario.es.
“Son los Presupuestos más sociales de la historia de la autonomía”.
“Refuerzan el gasto social”. “Blindan el gasto social”. “El gasto social
nunca ha sido más amplio en Galicia”. Son algunas de las afirmaciones
lanzadas en la última semana por la conselleira de Hacienda y por el
presidente de la Xunta para explicar el contenido de los Presupuestos
Generales del Gobierno gallego para 2014. Elena Muñoz y Alberto Núñez
Feijóo insisten en que “ocho de cada diez euros” del erario van para las
partidas sociales, lo que los lleva a concluir que no hay autonomía que
llegue al nivel de Galicia: estamos “a la cabeza de España en políticas
sociales, sanitarias y educativas”, sentencia la conselleira. Las
cifras, no obstante, dicen otra cosa.Si bien es cierto que el porcentaje de presupuesto dedicado a partidas sociales en los últimos años ha aumentado sistemáticamente, no lo es menos que la capacidad de gasto –no financiero– del Ejecutivo ha pasado de 10.581 millones en 2009 a 8.391 millones en 2014. Por lo tanto, esos “ocho de cada diez euros” elevados a los titulares se calculan sobre un montante total cada vez menor. Partiendo de esta base, un vistazo a la evolución de las principales partidas sociales del presupuesto desde el retorno del PP al poder permite afirmar que la inversión social, lejos de haberse incrementado, sufre una caída acumulada que supera los 838 millones de euros.
Una manera de realizar este análisis es prestar atención a las funciones y programas dedicados a la política social en los diferentes departamentos autonómicos. Así, por ejemplo, entrarían en la suma los fondos de la Secretaría General de Igualdad, con dependencia orgánica de la Vicepresidencia; la cooperación al desarrollo, también dependiente de la consellería de Alfonso Rueda; la parte de servicios sociales de la Consellería de Trabajo y Bienestar; el I+D+i y las evidentes Sanidad y Educación. Una vez realizado este recorrido, un método posible es agrupar todas estas partidas en cinco grandes áreas: servicios sociales e igualdad, cooperación, educación, I+D+i y sanidad. Todas, sin excepción, han perdido dinero en este tiempo.
Las más afectadas por los recortes son, con diferencia, la cooperación al desarrollo y la investigación. En el caso de los fondos dedicados a la ayuda a países desfavorecidos, la llegada del gabinete de Feijóo ya supuso una caída inicial de 2 millones de euros, paso previo al desplome de los años siguientes, con un debilitamiento de casi 7 millones. El resultado es una aportación de 4,1 millones de euros en 2014, esto es, una rebaja de más del 64%. En un nivel próximo anda el I+D+i, primero encuadrado en Economía e Industria y después, en Educación. En su caso la caída acumulada es del 60,6%.
Los recortes sanitarios, educativos y de servicios sociales están a mayor distancia en términos porcentuales, si bien son más significativos por ser departamentos que manejan volúmenes presupuestarios mucho más abultados. Así, la Consellería de Educación se ha dejado por el camino un 14,8% de los fondos dedicados a la enseñanza, pasando de 2.384 millones en las últimas cuentas del bipartito a 2.031 en las últimas de Feijóo. En el caso de Sanidad, el departamento que más dinero maneja de toda la Xunta, los 3.546 millones de 2009 han pasado a 3.174, un 10,49% menos. Los programas menos afectados han sido los de servicios sociales e igualdad, con un 5,43% menos. En este caso, la abrupta caída en áreas como la conciliación de la vida familiar y laboral se ha compensado con la momentánea subida en otras, como la dependencia.
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