El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha adelantado en su comparecencia ante la Comisión de Justicia del Senado, algunos de los aspectos más relevantes que incluirá el Proyecto de Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ) para hacer más próxima la Justicia al impulsar un servicio cercano, ágil y amigable para los ciudadanos.
Para que ningún ciudadano resulte perjudicado en cuanto a los tiempos de respuesta de los órganos judiciales se establecerán nuevos criterios para el reparto provincial de asuntos sin que desaparezcan los partidos judiciales. Así, cuando un juzgado supere el máximo de la carga de trabajo prevista, con la finalidad de evitar retrasos y demoras, se repartirán los asuntos a otros próximos con carga inferior.
Además, la LOPJ incorporará un criterio de especialización en materia tributaria en el ámbito de lo Contencioso, lo que contribuirá a fortalecer la confianza de los ciudadanos y de las Administraciones encargadas de los procedimientos de gestión y recaudación tributaria, e incrementará la seguridad jurídica.
Tasas
La reforma de las tasas judiciales ha sido otro de los asuntos abordados por el ministro en el Senado. Catalá ha propuesto estudiar los datos y la información aportados por el onsejo General del Poder Judicial, de los Puntos de Estadística Judicial y de la Agencia Tributaria para “asegurarnos que las tasas nunca puedan generar una limitación al derecho de acceso a la justicia por los ciudadanos”.
 Reforma LECR
En materia procesal, la reforma de la Ley de Enjuiciamiento Criminal permitirá agilizar las causas más complejas para hacer posible instruir y juzgar delitos sin necesidad de concatenar piezas e impedir así que los procesos se alarguen durante años. Además, la reforma fijará un plazo máximo de instrucción y se regulará de nuevo el comiso a través de la modificación de la carga de la prueba que contribuirá a que la sociedad vea cómo el delincuente devuelve los bienes que se le encuentran y que no es capaz de justificar.