Este tipo de externalización se está
generalizando en los Hospitales de todas las CCAA. ¡Privatizar para
empeorar! Antes había un control más directo del propio Hospital, con
supervisión médica diaria, tanto en la comida, como en el personal que
la confeccionaba. Ahora se hacen los controles que considere oportunos
la empresa (¿). Por supuesto, sin ninguna supervisión sanitaria oficial
del personal que trabaja a su servicio, aunque eso sí, pagando míseros
sueldos a sus trabajadores y/o reduciendo la calidad y cantidad de las
comidas, ya que tienen que tener beneficios. ¡¡Eso es la privatización!! Peor calidad, más beneficios privados.
Todo esto se produce por buscar fuera de
los servicios públicos productos y servicios más baratos, que a la larga
son más costosos y como podemos constatar, peligrosos para la salud de
los ciudadanos.
Esto, como otras muchas alteraciones en
los Servicios a los ciudadanos, provocadas por una austeridad llevada al
máximo en las AAPP (sin contrataciones o despidiendo a trabajadores), o
bien, por intento de abaratar costes económicos a costa de: Reducción
de efectivos en seguridad, bomberos, colas de espera en las
Administraciones, reducción de las prestaciones económicas, eliminación
de derechos sociales, aumento de las listas de espera en la sanidad,
peor atención y masificación en los centros educativos, etc..
No todo vale en nuestra sociedad, o así pensamos desde la USO.
Estamos viendo día a día, que la austeridad utilizada sin ningún tipo
de criterio, solo está sirviendo para empobrecer a la sociedad y dejarla
con unos servicios públicos mínimos, y muchas veces precarios.
Todo esto viene a colación de un Informe de la PSI (Internacional de Servicios Públicos), presento a la OIT (Organización Internacional del Trabajo), el pasado mes de junio.
En este informe se hace un resumen de
situaciones que en el mundo se están generando en base a la presión de
los “mercados” e instituciones financieras, los gobiernos utilizan sus
mismos argumentos económicos, para desmantelar los Servicios Públicos.
El modelo social europeo tal como lo hemos conocido, está
desapareciendo, ahora se prioriza los beneficios de empresas y bancos,
en lugar de pensar y gobernar para las personas.
Las privatizaciones del Sector Público,
con subcontrataciones y contratos temporales en precario, son hoy en día
una constante en nuestras AAPP. Esto puede suponer romper el “molde” de una Administración Pública independiente, cuyo único objetivo sea proporcionar servicios públicos de calidad a nuestra sociedad.
Por otro lado, también desaparecerá uno
de los papeles importantes de nuestra Administración, dar ejemplo al
resto de empresas privadas, en materias tan importantes como: Políticas
de igualdad real, mejora en la salud laboral, equiparación salarial,
igualdad de oportunidades a la hora de acceder a un puesto de trabajo
mediante Ofertas de Empleo Público, eliminación o disminución de los
contratos precarios, contratación pública, etc.
Por cierto, este último punto es
importante, ya que la contratación pública es un gran motor de la
economía. Y su paralización, ha supuesto la eliminación de multitud de
puestos de trabajo a través de las empresas adjudicatarias (más de
300.000 se calcula en algunos estudios).
Aunque llegados a este punto, no podemos dejar de hablar de corrupción. O mejor en mayúsculas: ¡¡CORRUPCIÓN!!
Esto es uno de los problema que la
austeridad está haciendo crecer. En España, por desgracia hemos visto
multitud de casos, donde los políticos de todo tipo (gestores públicos,
Comunidades Autónomas, Ayuntamientos, partidos políticos, etc.), han
generado un grado de desconfianza muy elevado, para una sociedad
democrática como la española, basada precisamente en los partidos
políticos
Podemos hablar de multitud de casos: Caso
Barcenas, caso Liceo en Catalunya, caso Filesa, caso Baleares, caso C.
Valencia, operación campeón en Galicia, etc., por no hablar de multitud
de “casos” que se han dado en miles de Ayuntamientos.
No puedo dejar de hablar de los ERE´s en
Andalucía, donde por desgracia se ha destapado una trama en la que
participa el Gobierno de la Junta y un sindicato. Y que además, según se
está publicando en los medios de comunicación, también hacían trampas
en la formación.
Esto último, me duele mucho más, ya que
los sindicatos debemos ser un ejemplo claro para la sociedad, de
transparencia, honradez y solidaridad. Jugar con dinero ajeno un
sindicato, es caer en principios morales muy bajos.
En cuanto al tema de la formación, se
está destapando algo que la USO, ha argumentado durante muchos años y es
el uso fraudulento de los fondos de formación.
En la FEP-USO, siempre nos hemos
preguntado lo mismo cuando se discuten el reparto de fondos de
formación. Jugar con dinero ¿como es posible si existe una valoración
técnica de los programas de formación, que UGT y CCOO reciban el mismo
importe? ¿Cómo es posible que coincidan al 100% en las cantidades que
reciben? ¿Por qué la USO es siempre la elegida para las inspecciones
sobre el gasto y el desarrollo de los programas formativos? En este
punto, nunca hemos tenido problemas, ya que cumplimos los requisitos
escrupulosamente, incluso hemos recibido dos premios a la calidad de
nuestros cursos, pero nos preguntamos: ¿es que no se hacen controles a
TODOS los sindicatos? ¿ Solo a la USO?.
La corrupción es un veneno que
destruye la confianza de los ciudadanos en las instituciones públicas,
los gobiernos y la misma democracia. La verdadera democracia exige respeto y condiciones justas e igualitarias para cada ciudadano y ciudadana.
El pago de sobornos para obtener
contratos pervierte las decisiones relativas a políticas públicas,
desviando el dinero público a personas corruptas. La corrupción a gran
escala por parte de políticos y empresas, pervierte el propio Estado.
Adjunto un documento resumen de las
propuestas de la PSI, que como conclusiones finales, con la que estamos
en total acuerdo, y que hace entre otras muchas recomendaciones las
siguientes:
- Todos los trabajadores del servicio público deberían recibir un salario digno que les permita vivir y sea suficiente para eliminar el incentivo de utilizar de manera corrupta su cargo.
- Las decisiones políticas no deberían influir en el nombramiento, la evolución profesional, la sanción o el despido de trabajadores del servicio público.
- Todos los empleados del servicio público deberían estar sujetos a un código disciplinario que incluya sanciones severas en casos de corrupción.
- La formulación de políticas públicas no se debería externalizar a consultores.
- Los consultores o intereses empresariales privados no deberían formar parte de organismos responsables de decisiones con respecto a políticas públicas o la asignación de contratos públicos, como las unidades de APP.
- Los bancos y donantes internacionales no deberían exigir ninguna forma de privatización como condición para ayudas o préstamos.
- Los procesos para la compra de productos o contratación de servicios deberían ser totalmente públicos y transparentes.
- Se debería prohibir a una empresa participar en la licitación para contratos públicos si la empresa, o su empresa matriz, empresas filiales o asociadas, han sido condenadas por corrupción en algún país o utilizan paraísos fiscales.
- Los organismos de auditoría pública y su personal deberían estar bien protegidos de la injerencia política o comercial (Organismos de control: AEAT, Intervención, Justicia, etc.)
- Los organismos de auditoría pública deberían contar con amplios poderes para exigir la divulgación.
- Se debería permitir y exigir a los organismos de auditoría pública que publiquen y divulguen sus conclusiones y promuevan respuestas públicas.
- La legislación sobre la libertad de información debería exigir la divulgación a todos los ciudadanos de todo tipo de información sobre las finanzas públicas, incluidos los salarios en el servicio civil y las condiciones de todos los contratos.
- Sanciones legales:
- Las sanciones por corrupción deberían incluir la prohibición a largo plazo de que se adjudiquen contratos a ciertas empresas y cualquier empresa matriz, filial, asociada o sucesora.
LA CORRUPCIÓN ES CONTRARIA A LA DEMOCRACIA.
Por una sociedad más justa:
¡¡Defiende TUS Servicios Públicos!!
¡NO, a las privatizaciones, ni a las externalizaciones!
